Dejar ir…

Soltar, liberar. dejar ir, desapegar son distintas expresiones para lo mismo.

Por qué nos cuesta dejar ir a un ser querido que falleció?

Por qué nos cuesta soltar a nuestros hijos para que sigan su propio camino?

Por qué nos cuesta tanto soltar a las parejas que nos lastiman y humillan?

Es que acaso nos gusta sufrir? Acaso nos gusta ser víctimas?

Es tiempo de cortar con la ideología y el pensamiento de que todo nos pertenece. No es cierto, nada es nuestro y tampoco ninguna persona es de nuestra propiedad. Así como nosotros mismos no somo de nadie.

La muerte es parte de la vida, es solo un paso más en nuestra evolución.

Por otro lado nuestros hijos son parte de nuestra vida pero no son nuestros, y en algún momento debemos dejarlos que caminen su propio sendero para que puedan cumplir con su destino.

Las parejas que nos hacen sufrir y que a veces tanto nos cuesta alejar de nuestras vidas, solo son parte de nuestro crecimiento. Al pensar en ellas tenemos que abrir los ojos y ver qué pasaba dentro nuestro en ese momento, por qué dejamos entrar a nuestras vidas un ser tal vez nefasto? En qué situación estábamos que no vimos sus verdaderas intenciones? A todos en mayor o menor medida nos ha pasado lo mismo o algo similar.

Pero cada vez que cosas malas o negativas nos suceden, tenemos que luchar para transformar lo malo en algo bueno y lo negativo en positivo.

«Siempre, absolutamente siempre todo pasa por algo…Nada está librado al azar». No existen las casualidades…solo hay causalidades!!!

Recuerden: No podemos evitar lo malo pero podemos transmutarlo en cosa buenas y aprender. Solo así la vida nos va a sonreír siempre!!!!